Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

Acción de Gracias: un acto transformador

En la sociedad de hoy, el dar gracias es algo que hemos limitado a una semana del año. Todos esperamos con ansias esa semana, donde muchos de nosotros comeremos la tradicional cena de pavo como anticipo y bienvenida al período navideño. Pero en las Escrituras, el dar gracias es una de las herramientas más poderosas que tenemos como familia espiritual. La Palabra está llena de diferentes personajes y momentos donde las personas dieron gracias aún en medio de diversas pruebas. Ahora bien, ¿por qué el acto de agradecer es fundamental según la Palabra y cómo Jesús mismo nos dejó un ejemplo sobre cómo ser agradecidos en todo momento?

La Esencia de Dar Gracias

La Biblia, en diversas ocasiones, resalta la importancia de dar gracias. En 1 Tesalonicenses 5:18, encontramos la instrucción directa de “dar gracias en toda circunstancia, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”. La gratitud, entonces, no es simplemente una sugerencia, sino un componente esencial de la voluntad de Dios para nuestras vidas. Por otro lado, cuando observamos la vida de Jesús, podemos adentrarnos en un viaje de agradecimiento constante. En los evangelios, vemos cómo expresaba gratitud antes de realizar milagros, como cuando multiplicó los panes y los peces (Mateo 14:19), señalando la importancia de agradecer incluso antes de recibir.

Ahora bien, Jesús no limitó su gratitud a momentos de abundancia. En la Última Cena, tomó el pan y dio gracias incluso sabiendo lo que le esperaba (Lucas 22:19). Este acto revela una comprensión profunda de que la gratitud trasciende las circunstancias y es un ancla en medio de las tormentas y las cosas que sabemos que nos esperan. Pero al conocer esto, podemos entender que dar gracias no es solamente cuando las cosas suceden a nuestro favor, sino también cuando las cosas no funcionan como queremos.

La Transformación a Través de la Gratitud

Dar gracias no solo es una formalidad; es un medio de transformación. La Palabra narra que en cierta ocasión, Jesús se encontraba de camino a Jerusalén cuando se le acercan diez leprosos (Lucas 17:11-19). “¡Jesús, ten misericordia de nosotros!” gritaban aquellos diez hombres. Jesús se les acerca y los ordena que fueran al Sacerdote, ya que en ese tiempo era el único que podía certificar la sanidad de ellos. Cuenta la historia que mientras iban de camino, los diez leprosos fueron sanados. Me imagino que todos celebraron, brincaron, saltaron y se regocijaron. Desafortunadamente, solo uno de los leprosos regresó para darle gracias a Jesús:

17 Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están? 18 ¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero? 19 Y le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha salvado.

Por lo tanto, a través de esta historia, podemos entender que el agradecimiento no solamente trae sanidad a nuestras vidas, sino también trae un proceso de restauración y salvación. Cuando agradecemos, rompemos con nuestras limitaciones y actuamos en fe, porque sabemos que Dios es el único que puede suplir nuestras necesidades y sanar nuestras enfermedades. Pero el corazón agradecido, no solamente trae sanidad, sino restauración. A continuación quiero compartir contigo varias maneras que podemos aprender a ser agradecidos en todo:

  1. Comienza y Termina tu Día con Gratitud: Inicia y concluye cada día reflexionando sobre las cosas por las que estás agradecido. Inclusive, incluye un tiempo de acción de gracias en tus tiempos de oración diarios.
  2. Expresa Agradecimiento en la Adversidad: Incluso en los momentos difíciles, encuentra razones para dar gracias a Dios. La gratitud en la adversidad fortalece nuestra fe y confianza en nuestro Padre.
  3. Agradece Antes de Recibir: Sigue el ejemplo de Jesús agradeciendo antes de recibir. Este acto de fe demuestra confianza en la provisión que sólo viene de Dios.
  4. Comparte tu agradecimiento con otros. Las personas necesitan escuchar tu agradecimiento, ya que a través de tu confianza en Dios, aún en los momentos difíciles, las personas que te rodean entenderán que tu fortaleza no viene de como te sientes ni de tus circunstancias, sino de nuestro Dios.

Esperamos que en este tiempo puedas dar gracias a Dios por todo lo que has recibido, y que también, a través de tu agradecimiento, puedas tener fe en lo que Dios es capaz de hacer a tu vida y a los de tu casa.

Leave a comment

¡Suscríbete a nuestra lista de correo!